Bryan Adams- Into The Fire/Waking Up The Neighbours


Tras el rotundo éxito comercial y artístico de Reckless, Bryan Adams se encontró en la tesitura de como repetir o incluso mejorarlo. Así que acompañado una vez más de Jim Vallance en labores de composición, y de Bob Clearmountain en las de producción, lanzó tres años después Into The Fire.

Este disco que llegó al número 7 del Billboard y vendió millones de discos, se convirtió incomprensiblemente en uno de los más ignorados de la carrera del canadiense y se consideró un fracaso incapaz de continuar tras la estela de Reckless. Pero es que no sólo las ventas fueron extraordinarias, pues esto podría deberse al fruto del impacto de su anterior álbum. Es que Into The Fire es un disco sólido y maduro, en el que busca una mayor profundidad lírica. En el que no hay una canción mala, y con unas cuantas verdaderamente sobresalientes. Quizás el fallo del disco es que no cuenta con uno o dos hits inapelables como los que acostumbraba a grabar Adams, pero esto también juega a favor del conjunto. Ahora cada una de las diez canciones es importante, y no saltamos de una a otra buscando el sencillo exitoso. Mención aparte de su magnífica portada tan sencilla y elegante como ochentera y sugerente, con el artista en primer plano pero cediendo la mayor porción de imagen al moderno puerto industrial recortado entre el cielo y el mar.

La capacidad que despliega la dupla Adams- Vallance para moverse sobre el rock norteamericano clásico y llevarlo al terreno de los estribillos memorables y los himnos de estadio es para estudiarla. Esto queda bien demostrado en las iniciales Heat of the night e Into the fire, primer y cuarto single del disco con acordes sencillos, la voz de Adams desgarrada y ritmos de bajo cadenciosos. Victim of love es un medio tiempo atípico para aquella época de power ballads clónicas. Como atípicas son para un disco AOR, las temáticas que abordan Another day y Native son, que tratan sobre la dificultad de vivir con lo justo y estar sin trabajo en la primera, y la opresión de los colonizadores blancos sobre los indios de Norteamérica en la segunda. Como podéis ver todo es posible en el AOR. Only the strong survive es una canción alegre que en principio iba a formar parte de la banda sonora de Top Gun, pero que el cantante decidió retirar para que no apareciera en una película sobre guerra. La apasionada Rebel había aparecido dos años antes en el Under a Raging Moon de Roger Daltrey, con la peculiaridad de que aquí Adams lo canta en tercera persona, mientras que el británico lo hace en primera. Remembrance day sigue la línea intensita del disco recordando a los caídos en la Primera Guerra Mundial, mientras que Hearts of fire desborda, por fin, alegría y diversión en consonancia con discos anteriores del canadiense. La final Home again es un nostálgico cañonazo lleno de épica rockera con un teclado que crea una atmósfera inigualable y un estribillo de los que hacen época.

Cuesta entender como Into The Fire ha quedado tan olvidado y dejado de lado, sus canciones apenas aparecen en los recopilatorios del artista y raramente las recupera en conciertos. Adams canta mejor que nunca, el grupo se escucha maravilloso y las canciones están a un gran nivel lírico.




Quizá como respuesta y búsqueda ante este relativo fracaso, el cantante y compositor decidió echar mano del productor que había puesto a Def Leppard en la cúspide del rock ochentero el mismo año que salió Into The Fire. Mutt Lange metió mano en las canciones de Bryan Adams, y como resultado apareció Waking Up The Neighbours con su sonido electrónico y sintético tan característico. La influencia del productor llega hasta las composiciones, sustituyendo a Jim Vallance. Y en este aspecto es tan cierto que Adams sigue manteniendo en parte su personalidad y sonido característicos, como que llegados al otro extremo, Don´t drop that bomb on me podría pasar tranquilamente por una canción del Hysteria o el Adrenalize y casi no nos daríamos cuenta. También volvió a las temáticas sencillotas y tontorronas en sus letras, abandonando en gran parte (porque aquí algo queda) aquellas con más compromiso social, puede que creyendo que se había pasado de pretencioso para lo que se esperaba de él.

Muy lejos de ser el armagedón artístico que algunos seguidores le otorgan, Waking Up The Neighbours se erige como una buena obra del artista, con una buena combinación de baladas y canciones rockeras, una magnífica y limpísima producción de las que Lange cuidaba al milímetro, y un buen puñado de hits (esta vez sí) que han acompañado, y acompañan, a varias generaciones. Lo que menos me gusta, y que también es marca del productor, es la duración a veces excesiva de las canciones y el amplio número de ellas.

Dos de los grandes éxitos del doble álbum fueron las baladas (Everything I do) I do it for you que apareció en la banda sonora del Robin Hood de Kevin Costner, y de la que un dolido y despechado Vallance se quejaría porque al cantante ahora no le importaba que sonara en una película en la que moría gente si era con espadas y flechas (en referencia a Only the strong survive, que se retiró de Top Gun) y Do I have to say the words. La primera se convirtió en uno de sus temas más radiados y conocidos, y al que yo le tengo manía por sobado y empalagoso, aunque sigo creyendo que es un gran tema. Mientras que la segunda me gusta mucho más, con ese ritmo tan cálido y la voz rasgada de Adams.

Otra de las canciones más recordadas del disco es Can´t stop this thing we started, una de esas tonadas que se pegan de forma inmediata gracias a su estribillo marca de la casa y al excelente solo de Keith Scott. Las iniciales Is your mama gonna miss ya y Hey honey I´m packing you son dos de esos temas rockeros que tan bien consigue llevar por el terreno más accesible con un fino barniz sonoro de parte de Lange. Son Not guilty, donde hace un símil entre las relaciones amorosas y la ley, y Vanishing, en la que critica como se gastan el dinero los millonarios, dos de sus temas en los que el sonido Lange se impone claramente. Mientras que en Depend on si que escuchamos al Bryan Adams de toda la vida. All I want is you es una power ballad más al uso donde los coros a lo Leppard campan a sus anchas.

Waking Up The Neighbours daba carpetazo a la época más interesante de Bryan Adams, que aunque fue diluyendo su sonido original, ha conseguido sobrevivir durante más de cuatro décadas en la música, lo que no es decir poco.

La banda:

Bryan Adams- voz, guitarra, piano y teclado

Dave Taylor- bajo

Keith Scott- guitarra y coros

Mickey Curry- batería

Jim Vallance- piano y percusión

Tom Mandel- órgano y teclado

Dave Pickell- piano

Bill Payne- piano y órgano

Larry Klein- bajo

Robbie King- órgano

Ian Stanley, Phil Nicholas, Brenda Nicholas, Ed Shearmur- teclado

Las canciones:

Into The Fire:

1- Heat Of The Night

2- Into The Fire

3- Victim Of Love

4- Another Day

5- Native Son

6- Only The Strong Survive

7- Rebel

8- Remembrance Day

9- Hearts On Fire

10- Home Again

Waking Up The Neighbours:

1- Is Your Mama Gonna Miss Ya?

2- Hey Honey I'm Packin' You In!

3- Can't Stop This Thing We Started

4- Thought I'd Died And Gone To Heaven

5- Not Guilty

6- Vanishing

7 - House Arrest

8- Do I Have To Say The Words?

9- There Will Never Be Another Tonight

10- All I Want Is You

11- Depend On Me

12- (Everything I Do) I Do It For You

13- If You Wanna Leave Me (Can I Come Too?)

14- Touch The Hand

15- Don't Drop That Bomb On Me

Los discos:

Año- 1987/1991

Discográfica- A&M Records

Duración- 45:14/74:46 minutos
























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