El canadiense Stan Meissner ha conocido el éxito en su faceta como compositor para diferentes artistas. Abanico variado que incluye desde bandas conocidas por aquí como Alias, Triumph, Lee Aaron o Toronto, a divas del pop como Celine Dion y Lara Fabian. También ha participado en bandas sonoras de peliculas como Viernes 13 y series como Sensación de vivir. Además de una breve carrera discográfica bajo su nombre, que nos dejó tres discos que no pasaron del underground aorero de su tiempo. En definitiva uno de esos talentosos secundarios que han poblado la historia de la música popular a lo largo de los tiempos.
Pero el motivo que le trae hasta estas páginas no es esa también recomendable carrera en solitario, sino un proyecto que vio la luz cuando a casi nadie le importaba ya el AOR y que consiguió hacerse un hueco entre esos clásicos de culto que aparecieron muy fuera de su tiempo. Metropolis es más que una banda, una pareja multitarea formada por Peter Fredette (Streetboy, Kim Mitchell) y el propio Stan. Así como The Power Of The Night es un disco que por su esencia sonora y la historia de su desarrollo pertenece a un tiempo distinto de aquel hoy lejano 1999 en el que apareció. Un compacto que rompió moldes entre los aficionados al género por remitirse directamente al sonido imperante diez años antes, obviando cualquier atisbo de modernidad entre sus pistas. Y es que la mayor parte de las canciones que aparecen en The Power Of The Night se compusieron entre 1986 y 1991, incluso The darkest side of the night ya había sonado en la octava parte de Viernes 13.
Así pues, en Metropolis suena el Stan Meissner de impecable y elegante factura AOR que escuchamos en sus discos ochenteros, con un más que evidente toque Hi-tech en canciones como Walk through the fire, A million miles away, The eyes of love o la intensa The power of the night. Pero también el Meissner más marchoso, con canciones que se emparentan más con el AOR de comienzos de los noventa como Wild and blue, Never look back, Whatever it is o Running after a dream. Canciones que remiten al sonido de Clif Magness o Stan Bush.
Composiciones en las que colaboran Carl Dixon (Coney Hatch) Bruce Turgon (Lou Gramm, Shadow King) o los reputados Steve Diamond, Fred Molin y Steve Dorff. Canciones cuyo gran valor es remitir al pasado más glorioso del género, sin intención de aportar novedad alguna y en las que Meissner deja acertadamente la labor vocal a un Peter Fredette que brilla sin estridencias.
Habrá quien lo encuentre insulso por su escasa originalidad y habrá quien lo disfrute a lo grande por el mismo motivo. En cualquier caso The Power Of The Night se erige para el que opina como la mejor obra de Meissner, y un disco deliciosamente atípico en un momento en el que musicalmente rompían las listas de éxitos bandas como Deftones o Limp Bizkit.
La banda:
Stan Meissner- guitarra, teclado y batería
Peter Fredette- voz y bajo
Las canciones:
1- Wild and Blue
2- The Darkest Side of the Night
3- Never Look Back
4- Walk Through the Fire
5- Restless Moon
6- A Million Miles Away
7- Whatever It Is
8- The Eyes of Love
9- The Best Is Good Enough
10- Running After a Dream
11- The Power of the Night
El disco:
Año- 1999
Discográfica- MTM Records
Duración- 49:06 minutos
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