A Gary Moore ya le tuvimos por aquí, con un proyecto americano de finales de los setenta que llevó por nombre G-Force. Aquella breve aventura pasó por su tiempo sin demasiada pena ni gloria, a pesar de ser un notable disco en el que el guitarrista se apegaba al rock de efluvios radiables.
Ya metidos en los ochenta, Moore se había consolidado gracias a discos como Corridors Of Power y Victims Of The Future. Pero aún le faltaba un empujoncito para arrancar de verdad en listas de éxitos. Quizá por esto, los teclados de Neil Carter se convertirían en grandes protagonistas de este Run For Cover.
Al guitarrista le acompañaría un elenco de lujo que incluía a Glenn Hughes, Don Airey, Paul Thompson, Bob Daisley, y su amigo Phil Lynott, en la que fue su última grabación, pues menos de un año después moriría por sobredosis. Punto aparte para la producción, de la que se encargaron Andy Johns (The Rolling Stones, Led Zeppelin, Free), Beau Hill (Streets, Fiona, Europe), Peter Collins (Billy Squier, Bon Jovi), y Mike Stone (Journey, Foreigner, Asia, Whitesnake) es decir, cuatro de los tipos más reclamados y alabados del momento.
Músicos de lujo para un disco que, a pesar de su acentuada vena comercial, ha conseguido convencer a casi todo su público de ser uno de los mejores trabajos de Gary Moore (sino el mejor) . Las diez canciones del compacto (en el vinilo no aparecía Out of my system) suenan de lujo, con la garra guitarrera que pone siempre el irlandés, la habitual épica hardrockera que imprime a sus temas, y unos teclados ochenterísimos, que bien podrían haber formado parte de la BSO del Akumajou Dracula del Sharp X68000. Ni un descarte en los cuarenta y pico minutos que dura Run For Cover, que comienza con la trotona y arrolladora pieza del mismo nombre, sigue con una sensual Reach for the sky (que se encarga de cantar Hughes como los ángeles ), el romanticismo de la revisitada Empty Rooms (ya incluida en su disco anterior) el AOR pegadizo y elegante de Out of my system, Once in a lifetime y Listen to your heartbeat, el riffeo desbocado de Nothing to lose y All messed up, o las políticas (algo bastante inusual para estos discos) y potentes Military man y Out in the fields.
Precisamente, el mayor éxito comercial se lo llevó esta última, llegando hasta el número 5 de las listas británicas. Lo que tiene mérito, tratándose de un tema que habla sobre la problemática situación política entre Irlanda y Reino Unido, en un momento en el que todavía se cortaba la tensión con cuchillo. Curiosamente, la nueva versión de Empty Rooms, también alcanzaría un buen puesto en listas, alzándose hasta un meritorio número 23.
Dos años después, llegaría su álbum más aclamado antes de pasarse al blues. Wild Frontier tenía mucho folk entre sus surcos hard rockeros, y a pesar de suponer el top comercial de Moore, la crítica siempre ha criticado el uso de una batería electrónica. Pero aquí nos quedamos con este fantástico Run For Cover cuyo sonido hard FM encaja de lujo en esta página.
La banda:
Gary Moore- voz y guitarra
Gary Ferguson- batería
Glenn Hughes- voz y bajo
Andy Richards- teclado
Charlie Morgan- batería
Philip Lynott- voz y bajo
Don Airey- teclado
Paul Thompson- batería
Neil Carter- teclado y coros
Bob Daisley- bajo
James "Jimbo" Barton- batería
Keith Murrell- coros
Las canciones:
1- Run for Cover
2- Reach For The Sky
3- Military Man
4- Empty Rooms
5- Out of My System
6- Out in The Fields
7- Nothing to Lose
8- Once in a Lifetime
9- All Messed Up
10- Listen to Your Heartbeat
El disco:
Año- 1985
Discográfica- Virgin
Duración- 45:55 minutos
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