Los apenas siete años que duró la carrera de Prism, al menos en su primera y más exitosa época, fueron un convulso vaivén de músicos. Fundados en 1976 por el empeño del afamado productor Bruce Fairbairn junto al por entonces batería Jim Vallance, el cantante Ron Tabak y el guitarrista Lindsay Mitchell, presentes desde el primer disco, se iban a convertir en sus miembros más duraderos. Diferentes circunstancias llevaron a la progresiva ruptura de la banda, un Vallance acomodado en su faceta de compositor y poco amante de las giras fue el primero que renunció. A Tabak lo despidieron por su carácter conflictivo y Mitchell abandonó el grupo al percibir poco interés tras el enésimo cambio de formación.
Para 1982 el nuevo cantante Henry Small se encontraba legalmente en posesión del nombre de la banda como último miembro "original" (entró en el grupo en 1981) por lo que decidió aprovechar el empujón de pequeño éxito que supuso Small Change, para grabar un disco que básicamente era un proyecto como solista, pero manteniendo el nombre de Prism.
Reunió para ello a un grupo de sesionistas de verdadero lujo entre los que se contaban Alan Pasqua (Giant) Bill Champlin (Chicago) Bobby Kimball (Toto) Mike Baird (Teri DeSario, Airplay, Airborne) Richie Zito (Bad English, Dakota) Timothy B. Schmit (Eagles) o Dennis Belfield (Stan Bush, I-Ten)
Mi elección de traer a Beat Street por aquí, en contra de otros discos probablemente mucho más significativos y recordados de la banda como su debut homónimo o Armageddon, se basa en que a pesar de ser un álbum poco representativo de su sonido original, bien amarrado en el AOR pomposo de finales de los setenta, y en el que no hay ni rastro de Jim Vallance, el compositor que más lustre dio a su música, se trata de un excelente conjunto de canciones AOR, que tienen un punto muy similar al que escuchamos en coetáneos como Shooting Star, 707 o Le Roux.
Desde el inicio con Nightmare se puede percibir que esa atmósfera "espacial" de teclados y armonías vocales rimbombantes, se ha perdido casi por completo en favor de un sonido más propio de los ochenta, que además podría encajar perfectamente en cualquier FM o película de la época. Todo una pérdida para algunos... y una verdadera alegría para los amantes de estas sonoridades, porque Dirty mind, Is he better than me, Wired, State of the heart o la balada I don´t want you anymore, son canciones que se pueden sentir como prototípicas. Pero tienen, la no tan fácil de conseguir, capacidad de ser temas directos, que entran a la primera, amén de estar fantásticamente interpretados por tan ilustres músicos.
Así pues, el hecho de que Beat Street sea una especie de bastardo en la discografía de la banda, no le resta ni un ápice de atractivo a un disco bastante más accesible a día de hoy que sus anteriores trabajos.
Ni que decir tiene que la crítica lo recibió con cajas destempladas y supuso el penúltimo fracaso comercial de un grupo que volvería brevemente bajo diferentes reencarnaciones en las siguientes dos décadas.
La banda:
Henry Small- voz, bajo y guitarra
Timothy B. Schmit- voz
Richie Zito- guitarra
Michael Baird- batería
Alan Pasqua, Jimmy Phillips- teclado
Dennis Belfield- bajo
Bobby Kimball- coros
Bill Champlin- coros
Las canciones:
1- Nightmare
2- Beat Street
3- Dirty Mind
4- Modern Times
5- Is He Better Than Me?
6- Blue Collar
7- Wired
8- State Of The Heart
9- Don't Want To Want You Anymore
El disco:
Año- 1983
Discográfica- Capitol Records
Duración- 34:02 minutos
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