Newman- One Step Closer/ Steelhouse Lane- Slaves Of The New World

 



El motivo de comentar juntos estas dos segundas obras de Newman y Steelhouse Lane es corroborar en que estado anímico, y cuales eran los caminos sonoros que estaba tomando el rock melódico enmarcado dentro de esa pequeña histeria que provoca un cambio de siglo a nivel social y musical. Ya saben, ese momento habitualmente tomado como crucial y en el que realmente no cambia nada. Aunque tampoco tendríamos que esperar mucho para que lo hiciera, el 11 de septiembre dejaría sobre las sociedades occidentales una insidiosa sensación de inseguridad física. Sensación que remataría el crack financiero de 2008, encargado de desmontar todos los mantras que había defendido (y sigue defendiendo) el poder económico y financiero desde aquel "fin de la historia" que proclamara Fukuyama, y que instalaría una incertidumbre vital en las vidas de la mayoría de nosotros, que aún se extiende hasta hoy.

Musicalmente el grunge se había agotado hacía tiempo.Y la respuesta del otro lado del Atlántico, el brit-pop, agonizaba igualmente. Se puso de moda el Nü Metal, y bandas como Linkin Park y Korn gozaron de éxitos mundiales y efímeros. Todavía faltaba un poquito para que los grupos de estos movimientos fueran reemplazados a nivel popular por The Strokes, Franz Ferdinand, Muse o White Stripes. Mientras que el AOR, consumido casi diez años atrás y olvidado por el gran público, pasó a engrosar las filas de aquellos géneros que ya sólo existen en sellos especializados e independientes.

Y en aquellos tiempos dos guitarristas, un novato Steve Newman y el veterano Mike Slammer ponían en marcha Newman y Steelhouse Lane respectivamente. Bandas que echarían a rodar discográficamente separadas por un año, y que a pesar de sus diferencias representaban la manera de ponerse al día del rock melódico de corte más tradicional.

One Step Closer, segundo disco de Newman para el que repetía formación en trío junto a Mark Mulholland y William Marshall, es un disco más AOR, que me recuerda a los primeros Harem Scarem, Survivor o Giant. En él, no falta, ni falla el necesario guitarreo, pero gran parte de su magia descansa en los teclados y las armonías vocales. Canciones como la inicial y homónima One step closer, de total espíritu peliculero, es la punta de lanza de una colección de canciones que combinan el mejor sonido AOR con una agradecida producción actualizada, caso de Don´t walk away, Fire of love o Joanna.   

En comparación Slaves Of The New World, goza de la experiencia de Slamer, que también repetiría formación en formato de quinteto clásico, y de un sonido más hard rockero y contundente, que trae a mi mente grupos como Hardline o House Of Lords. La power ballad All I believe, y piezas en las que se alterna puño de hierro y guante de seda como Give it all to me, Seven seas, Turn Around, All or nothin´,  Nightmare begins o Find what we´re looking for, festonan un álbum que se ganó por méritos propios a público y crítica.

En definitiva el rock melódico miraba hacia adelante, pero sin necesidad de perder su impronta sonora de toda la vida. Agradecida resolución la de bandas como éstas para el seguidor más ortodoxo, al que no terminaban de convencerle los experimentos de grupos como por ejemplo Harem Scarem (Rubber por entonces) 

Las bandas:

Newman:
Steve Newman- voz, guitarra y teclados
Mark Mulholland- batería
William Marshall- bajo

Steelhouse Lane:
Mike Slamer- guitarra, teclado y bajo
Keith Slack- voz y coros
Alan Hearn- bajo
DeWayne Barron- batería
Chris Lane guitarra
Chris Thompson, Tony Fields coros

Las canciones:

One Step Closer

1- One Step Closer
2- Desperate Hours
3- Don't Walk Away
4- Judgement Day
5- Should've Been Me
6- Taboo
7- Fire of Love
8- Strongest Heart
9- Strange Animal
10- The Call
11- Joanne

Slaves Of The New World

1- Give It All to Me
2- Find What We're Lookin' For
3- Son of a Loaded Gun
4- Turn Around
5- Slaves of the New World
6- All I Believe In
7- Into Deep
8- The Nightmare Begins
9- All or Nothin'
10- Seven Seas
11- Where Are You Now

Los discos:
Año- 1999
Discográficas- Escape Music/ MTM
Duración- 54:14/ 53:59 minutos
















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