Puede que hoy suene extraño, e incluso muchos ni lo recuerden (o no lo quieran recordar) pero hubo un tiempo en el que el rock alternativo sonaba en las radios y televisiones musicales a casi todas horas. Aquel género gestado en los ochenta y que a partir de mediados de los noventa consiguió su máximo de popularidad en un batiburrillo diverso que podía incluír tanto a Limp Bizkit (¿los recuerdan?) como a Bloodhound Gang o Dinosaur Jr.
En lo que fue el último movimiento rockero más o menos original (lo que llega después no es más que revivalismo mejor o peor) pronto olieron sangre las grandes discográficas, y comenzaron la búsqueda de grupos que manteniendo un sonido parecido fuesen más radiables. Así aparecieron grupos como Garbage o Third Eye Blind.
Y mientras bandas como Buckcherry pegaban un puñetazo en la mesa con su hard rock-sleaze de herencia Motley Crue, otros buscaban la manera de encajar en la nueva escena alternativa sin dejar de lado las influencias del rock melódico de esencia ochentera. Hablo de 3 Doors Down, Nickleback, Hoobastank, Lifehouse o SR-71 que lograron repercusión gracias a esa mezcla de sonidos a la que pronto se subieron al carro algunas bandas clásicas como Bon Jovi vistas las posibilidades de éxito. Había nacido el nu breed o modern rock.
¿Que porque cuento todo ese rollazo? Por ponernos en situación, ya que aunque con la llegada del grunge, algunas bandas de AOR y hard rock melódico se intentaron acoplar al momento musical con escaso éxito, a principios de siglo la renovación del rock melódico encontró un camino intermedio fue mejor aceptada por los seguidores de siempre (quizá sólo como mal menor) y logró volver a entrar en las listas de éxitos merced a grupos como los anteriormente citados.
Así que estábamos en esas cuando a Gregg Fulkerson, conocido de la parroquia aorera por su banda Blue Tears y su excelente debut homónimo de 1990, se animaba a lanzar un grupo en esta línea musical de nombre Attraction 65.
Su único disco homónimo fue muy bien recibido a pesar de que el mundo del rock melódico es algo inmovilista. Y es que Attraction 65 apuesta por un sonido saturado y melancólico, pero no deja de lado las melodías y un marcada orientación comercial aunque propia de ese momento.
Hay muy buenos temas en este disco como la inicial Believe, Roll on, In another life, la acústica Stand o el tema de cierre Swept away. Aunque realmente no baja el listón en ningún momento y goza de una producción perfecta.
En definitiva un gran disco del añorado Gregg Fulkerson (Que falleció en 2009) Muestra de que un nuevo aire en el género era posible, en un momento que primaba más la renovación que la simple repetición de esquemas como ocurre actualmente.
La banda:
Gregg Fulkerson- voz y guitarra
Robert Streets- guitarra acústica y coros
Paul Zegelien- guitarra y coros
Ludo Baccherini- batería y coros
Michael Spears- bajo y coros
Las canciones:
1- Believe
2- Roll On
3- In Another Life
4- Train
5- Stand
6- Eden
7- Call My Name
8- Strong
9- Rise Above
10- Storm in My Heart
11- Swept Away
El disco:
Año- 2003
Discográfica- Atienza Records
Duración- 50:29 minutos
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